(19521) Chaos es un objeto del cinturón de Kuiper que se descubrió en noviembre de 1998, aunque existen capturas fotográficas,
previas al descubrimiento, que se remontan a diciembre de 1996, noviembre de 1993 y octubre de 1991. Recibió su
nombre oficial en el año 2002 [Caos, en español]. Tiene un
perihelio de 40.9 UA y un afelio de 50.3 UA. Tiene un diámetro aproximado de 600 km.
Según la Teogonía, en los inicio se encontraba Caos (término que literalmente significa "muy abierto"). Caos era el espacio oscuro y vacío a partir del cual aparecieron los primeros entes de la existencia. Poco después, tras Caos, apareció Gaia, la Tierra.
La hipótesis de Gaia, construida por James Lovelock y Lynn Margulis, sitúa al mundo como un superorganismo y ofrece una explicación de la autoorganización a escala global en términos de cambio y estabilidad.
(19521) Chaos tiene una comprensión profunda de las leyes espirituales que garantizan el libre albedrío y la libertad individual, al igual que en el libro "El poder de elegir" (Annie Marquier, 1991), o la película "El príncipe de Egipto" (1998), "Spirit. El corcel indomable" (2002), o al igual que en la wicca, una religión contemporánea fundada en 1953, cuyo principio fundamental se resume en "Haz lo que quieras, mientras no perjudiques a nadie.":
"La
rede wicca es una regla que significa "no perjudicar". Cuando haga
magia, cumpla esta regla estrictamente. En particular, la rede implíca
no hacer daño, herir, controlar o abusar de otra persona
intencionadamente. No perjudicar también se refiere a la no manipulación
del libre albedrío de los demás." (Gwinevere Rain, 2002; "La magia de
los encantos")
"
'¿Puedo hacer un hechizo sobre otra persona?', se estará preguntando.
Claro que puede, pero cuidado... ¡porque hay algunas cosas de las que
debería estar al tanto primero! Si un pariente o un amigo está enfermo,
lo lógico sería hacer un hechizo curativo, pero antes de hacerlo,
asegúrese de que la otra persona le da su permiso. [...] Los wiccans
creen en el libre albedrío. Si lanzase un hechizo sobre otra persona sin
su permiso (incluso un hechizo curativo), estaría invadiendo su propia
voluntad, lo cual sería perjudicial. Si la otra persona no quiere que le hagan un hechizo curativo, ella se lo pierde, pero también es su decisión." (Gwinevere Rain, 2002; "La magia de los encantos")
En el año 2002, en España se aprobó la ley 41/2002 de autonomía del paciente, que garantiza al paciente la información médica y establece que, si el paciente es mayor de 12 años, no puede ser medicado sin su consentimiento.